Indisociable de la Belle-Époque y de la ostentación de finales de la década de 1890, el movimiento Art Nouveau, caracterizado por su extrema riqueza, sus curvas y el abundante uso de hojas, árboles y flores, ha dejado una huella indeleble en la Ciudad de la Luz. Acompáñenos en un viaje en el tiempo a través de los símbolos y vestigios más bellos de este movimiento.
Entradas del metro Guimard
Si quiere encontrar el auténtico símbolo Art Nouveau de la capital, no busque más allá de las bocas de metro de su barrio. Algunas de ellas, diseñadas por Hector Guimard, se han convertido con el paso de los años en un auténtico emblema de París. Hoy en día, sólo la mitad de los 167 edificios han sobrevivido al paso del tiempo. Un vestigio del Art Nouveau que podrá admirar todos los días.
Edificio Lavirotte
El edificio Lavirotte fue construido en 1900 por el arquitecto Jules Lavirotte para el ceramista Alexandre Bigot. Al año siguiente, en 1901, el edificio, situado en el distrito 7 de París, fue galardonado con el premio de la Ciudad de París la Ciudad de París. Auténtica obra maestra del Art Nouveau adornada con cerámicas, molduras y balcones esculpidos, su fachada y su tejado fueron declarados Monumentos Históricos en 1964.
Immeuble Lavirotte, 29 Av. Rapp, 75007 París
Castillo Béranger
El Castel Béranger, una de las fachadas y puertas más singulares de la ciudad, es también uno de los mejores representantes del Art Nouveau en París. Aunque su fachada de ladrillo, piedra de molino, piedra y metal bien merece una visita, el portal del edificio es el centro de atención. Situado entre dos columnas, el pequeño portal, con sus herrajes de color turquesa y sus placas de cobre, representa el Art Nouveau en todo su esplendor.
Castel Béranger – 12-14, rue Jean de la Fontaine, 75016
La Samaritaine
Recién renovado y reabierto al público el 23 de junio de 2021, La Samaritaine se renueva tras quince años de interrupción. En esta guarida de joyas Art Nouveau y Art Déco, podrá comprar, pasear y hacer descubrimientos, como es tradición en los grandes almacenes. En resumen, el corazón de la Belle-Époque sigue latiendo en esta institución.
Samaritaine – 9, rue de la Monnaie, 75001
Bouillons parisienses
Como buenos gourmets de la capital, es difícil pasar por alto la moda del renacimiento de los bouillons parisinos. Estos bistrós generosos y económicos, que forman parte de la tradición culinaria parisina, están de moda desde hace unos años. Son verdaderas pepitas de oro del Art Nouveau, y la gente acude a ellos tanto por la cocina típica de los bistrós como por su maravillosa decoración, que nos transporta directamente al París de antaño.