«El patrimonio es el legado del pasado que disfrutamos hoy y transmitimos a las generaciones futuras. Nuestro patrimonio cultural y natural son dos fuentes insustituibles de vida e inspiración». Este extracto de la convención de la Unesco resume a la perfección el espíritu de la organización parisina. ¿Qué lugares de París e Île-de-France están inscritos en la Lista del Patrimonio Mundial de la Unesco ?
Las orillas del Sena en París: un paseo por la historia
Las orillas del Sena cuentan por sí solas la historia de París. A lo largo del río, encontrará monumentos emblemáticos como el Louvre o la Torre Eiffel, pero también joyas menos conocidas que bien merecen una visita. Déjese seducir por puentes históricos como el Pont Neuf o edificios religiosos como Notre-Dame y la Sainte-Chapelle en la Île de la Cité.
Provins, una ciudad medieval atemporal
Provins, Patrimonio Mundial de la UNESCO, es un viaje en el tiempo. Esta ciudad fortificada, famosa por sus ferias medievales, ofrece un marco único con sus imponentes murallas, torres y calles adoquinadas. A lo largo del año, eventos envolventes como banquetes históricos y fiestas medievales permiten a los visitantes revivir la época de caballeros y trovadores. Un destino ideal para los amantes de la historia.
Las maravillas del Castillo de Versalles
Majestuoso y emblemático, el castillo de Versalles es mucho más que un palacio: es una inmersión en la historia y el arte de vivir francés. Con sus suntuosas salas, como el famoso Salón de los Espejos, y sus jardines perfectamente geométricos adornados con fuentes y esculturas, esta finca es una obra maestra que hay que explorar.
Las visionarias creaciones de Le Corbusier
La región de Île-de-France rebosa de obras arquitectónicas de Le Corbusier, pionero del modernismo. Por todo París y sus alrededores, muchas de sus radiantes creaciones han hecho que el conjunto de su obra figure en la lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO.
La Tour Saint-Jacques, un tesoro gótico en el corazón de París
En pleno centro de París, la Tour Saint -Jacques es un testigo mudo del pasado medieval de la capital. Restos de una antigua iglesia destruida durante la Revolución Francesa, esta torre fue antaño punto de partida de los peregrinos que se dirigían a Santiago de Compostela. En la actualidad, fascina a los visitantes por su refinada arquitectura gótica y su rica historia, además de ofrecer unas impresionantes vistas de la ciudad desde su cima.
El Domaine de Fontainebleau, una residencia real atemporal
Fontainebleau es mucho más que un castillo: es un viaje a través de siglos de historia de Francia. Transformada y embellecida por Francisco I, la finca mezcla en perfecta armonía influencias italianas y tradiciones francesas. Sus vastos jardines y suntuosos interiores lo convierten en una visita obligada para comprender el legado de los reyes y emperadores que aquí se alojaron.