Después de una visita cultural, ¿qué puede haber más agradable que un paseo por los jardines de un museo? La oportunidad perfecta para seguir soñando, debatir sobre la exposición del mes y simplemente disfrutar de un gran momento de relajación.
La Maison de Balzac, un auténtico rincón del paraíso
El jardín de la Maison de Balzac es un verdadero paraíso para los amantes de la lectura y la tranquilidad. Situado en el distrito 16ᵉ, este íntimo jardín ofrece una impresionante vista de la Torre Eiffel y está repleto de plantas y flores que cambian con las estaciones. La propia casa, donde Balzac vivió y escribió parte de La Comédie Humaine, es un lugar de peregrinación para los amantes de la literatura francesa.
📍47, rue Raynouard, 75016 París
Jardín del Panteón Budista, la pepita del Museo Guimet
Este jardín, oculto tras el Museo Guimet, es un verdadero santuario de serenidad. Inspirado en los jardines japoneses, está adornado con linternas de piedra, un pabellón de té y bambú, ofreciendo un completo cambio de escenario en pleno centro de París. Es el lugar ideal para una meditación tranquila o un paseo relajante.
📍19, avenue d’Iéna, 75016 París
Los Jardines de Renoir en el Museo de Montmartre
Junto a la Place du Tertre, los Jardines de Renoir del Museo de Montmartre son un remanso de paz que te transporta al París de los impresionistas. Estos jardines, donde Pierre-Auguste Renoir pintó algunas de sus obras más famosas, ofrecen magníficas vistas de la ciudad y son perfectos para un paseo bucólico o un taller de pintura al aire libre.
El jardín del Museo Rodin, obras de arte en el corazón de París
El jardín del Museo Rodin es un auténtico museo al aire libre. Con sus tres hectáreas de vegetación, alberga algunas de las esculturas más emblemáticas del artista, como El PensadoryLa Porte de l’Enfer. Este jardín es un lugar de contemplación y serenidad, perfecto para un paseo cultural en el corazón de París.
📍77, rue de Varenne, 75007 París
El Museo de la Vida Románica y su silencioso jardín
El jardín del Museo de la Vida Románica es una pequeña joya escondida en el distrito 9ᵉ. Rodeado de rosales y fucsias, este jardín es un lugar encantador para los gourmets, en el café del museo. La casa, que fue vivienda del pintor Ary Scheffer, es un homenaje al Romanticismo parisino.
📍16, rue Chaptal, 75009 París
El Museo Zadkine, para un paseo artístico
El jardín del Museo Zadkine es un exuberante espacio verde donde las esculturas del artista Ossip Zadkine se funden con la frondosa vegetación. Situado en la antigua casa y estudio del escultor, este jardín es un lugar muy tranquilo, ideal para pasear.
📍100 bis, rue d’Assas, 75006 París
El Petit Palais, uno de los jardines ocultos más bellos de París
El jardín del Petit Palais es un verdadero oasis en el corazón de París. Protegido por las murallas del museo, este jardín, con sus estanques y columnatas, es el lugar perfecto para evadirse de todo. El café-restaurante del museo, con su agradable terraza, es perfecto para relajarse tras una visita a las exposiciones.
Los jardines del museo Albert-Kahn, los más impresionantes de París
El jardín del museo Albert-Kahn es un espacio de cuatro hectáreas que te lleva de viaje por paisajes de todo el mundo. De los jardines japoneses a las praderas americanas, pasando por los bosques europeos, este jardín es un viaje botánico de descubrimiento y un cambio total de escenario. Hay que decir que el filántropo era un verdadero amante de la naturaleza. Cada uno de estos jardines ofrece una experiencia única, que combina arte, cultura y naturaleza, y es la escapada perfecta del ajetreo de la ciudad.
📍10-14, rue du Port, Boulogne-Billancourt