París es mágica, pero sus alrededores son igual de fabulosos. Castillos, pueblos escarpados, lugares secretos… Hoy le proponemos visitar el castillo de Villette, un lugar absolutamente espléndido cuyos decorados han servido para rodar una película de fama mundial. Apodado el «Pequeño Versalles«, está mucho menos concurrido que el Palacio Real de Versalles… Y sin embargo, como verá, merece la pena divertirse.
Castillo de Villette: un «mini Versalles» a las afueras de París
Catalogado como monumento histórico desde 1942, el castillo de Villette es uno de los edificios más notables de nuestro patrimonio. Escondido en un bosque de 75 hectáreas, fue diseñado por Jules Hardouin-Mansart, arquitecto de Luis XIV. A él se debe en parte la creación del castillo de Versalles. Sus elegantes jardines, típicos del estilo francés, fueron diseñados por André Le Nôtre, famoso por haber creado los magníficos jardines de Versalles… El apodo de «pequeño Versalles » le viene como anillo al dedo.

Al igual que en la casa del Rey Sol, los jardines cuentan con estanques, setos cuidadosamente recortados y una magnífica fuente en cascada. Un entorno bucólico sublime, que ahora se utiliza exclusivamente para bodas, sesiones de moda… e incluso rodajes. Si quiere visitarlo algún día, tendrá que ser invitado a una boda…
Un castillo que inspiró «El Código Da Vinci
Durante su estancia en el castillo, el escritor Dan Brown se inspiró para escribir su bestseller El Código Da Vinci. Y la finca fue tan importante para él que fue uno de los escenarios de la adaptación cinematográfica de su novela.

Con su entorno mágico y su arquitectura perfectamente cuidada, el castillo sigue acogiendo rodajes hoy en día. Recientemente se han rodado aquí algunos planos de la película El Conde de Montecristo y de la serie Dinastía. Una prueba de que la finca sigue haciendo soñar…