Cuidado, amantes de los cócteles. En el corazón de la festiva rue Princesse, en el distrito 6 de París, anida un bar de ginebra llamado Tiger. En este entorno urbano, con su exuberante decoración selvática y su acogedor ambiente, un equipo de apasionados barmans y mixólogos ponen al día la ginebra con una carta de más de 130 variedades de ginebra, para tomar como cóctel o con una tónica de la casa. En total, ¡hay más de 1014 combinaciones posibles de Gin Tonic!
Tiger: el primer bar de ginebra de París
La aventura comenzó con una profunda pasión por el arte de la ginebra. Inspirándose en la riqueza de esta bebida, crear un local cosmopolita que celebrara su historia y evolución fue una elección obvia para el grupo Coolangatta.
Mucho más que un bar de cócteles, es el primer bar de ginebra de la capital. Como habrás deducido, el rey de la jungla aquí es el espíritu de la ginebra creado en Holanda. Está aquí en todas sus formas, en creaciones de autor con nombres traviesos, como la decoración del bar clandestino inspirada en una selva tropical: Bissap Rocky, The Notorious, Tiny Peat, Salato Negroni. .. Aunque también puedes encontrarlo (sobre todo) en estado puro, para obtener toda su esencia, con una tónica casera de la que nos encantaría saber más. Y no te preocupes, si la ginebra no es lo tuyo, Le Tiger también ofrece sabrosas creaciones de cócteles con otros licores.
Su original fachada, totalmente cubierta de plantas, llama la atención e invita a entrar. En el interior, la decoración exóticay sofisticada subraya el ambiente único de este templo de la ginebra, con sus azulejos de mosaico turquesa, papel pintado de hojas de palmera y banquetas azul zafiro -tan suaves como pueden serlo- donde podrás sentarte y saborear deliciosos cócteles artesanales acompañados de platos para compartir, especialmente diseñados para complementar las sutiles notas de la ginebra.
Pero eso no es todo. Al caer la noche, sube la temperatura y el ambiente se va creando al ritmo de los fogosos DJ sets. Con sus tres zonas diferenciadas, que pueden hacerse privadas, el local es un auténtico imán para las fiestas. Si buscas escapar de la monotonía de los bares parisinos, piensa en Tigre. Vienes aquí para sumergirte en el mundo de la ginebra, por supuesto, pero te quedas por el ambiente, la convivencia y ese pequeño toque exótico que marca la diferencia.