Esta primavera, nos vamos al oeste de la capital para descubrir uno de sus tesoros más bellos. El Parque de Bag atelle, de 24 hectáreas, es un lugar para pasear y disfrutar, pero también es un lugar histórico, objeto de una apuesta entre María Antonieta y el Conde de Artois. Nada como un paseo por este hermoso espacio verde para dar la bienvenida al buen tiempo.
El Parque de Bagatelle, uno de los espacios verdes más bellos de París
Uno de los cuatro centros de los jardines botánicos (junto con el Arboreto, el Parque Floral y las Serres d’Auteuil), el Parque de Bagatelle es muy popular entre los visitantes. El Parque de Bagatelle fue creado en 1775 por el Conde de Artois, que lo hizo construir en sólo sesenta y cuatro días. Diseñado por Bélanger y trazado por Thomas Blaikie, refleja el estilo anglo-chino, alejado del rigor de los jardines franceses. Adquirido por el Ayuntamiento de París en 1905, se convirtió, bajo el impulso de Jean-Claude-Nicolas Forestier, en un notable jardín botánico, famoso por su rosaleda y su concurso anual inaugurado en 1907.
En la actualidad, el parque cuenta entre sus numerosas atracciones con una magnífica pagoda china del siglo XIX. En cuanto a la vegetación, el parque alberga varios jardines temáticos, como el Jardín del Iris y el Jardín del Presentador. Y mientras pasea por el parque, seguro que se topa con algunos de los habitantes más singulares de la zona, concretamente los magníficos pavos reales. Si tiene suerte, incluso podrá ver a uno dando una voltereta.
Y para completar su visita, el Parque de Bagatelle ofrece numerosas actividades durante todo el año. Desde el Festival Chopin hasta el Octuor, pasando por los Musicales, la oferta musical es variada.
Parque de Bagatelle – 42 Route de Sèvres À Neuilly, 75016