No hace falta recorrer kilómetros para descubrir pueblos pintorescos. A menos de 100 km de París, hay numerosos parajes verdes que prometen espléndidas escapadas bucólicas. Pero entre todos los lugares verdes a los que escaparse en Francia, destaca un pueblo. Se trata de Gordes, un pueblo provenzal situado en lo alto de una colina. Descubra el pueblo más bonito del mundo, en el corazón de Francia.
Gordes, el pueblo más bonito del mundo, está en Francia
En febrero, los expertos en viajes Travel + Leisure publicaron su clasificación de los pueblos más bonitos del mundo. En lo más alto del podio, nos enorgullece encontrar un pueblo francés, Gordes. Este bello e histórico pueblo se sitúa por delante de Oia, en Grecia, Portofino, en Italia, y Grindelwald, en Suiza. Es cierto que el pueblo de Gordes está invadido de turistas en verano. Pero, ¿quién puede culpar a los viajeros por admirar todos los tesoros de uno de los lugares más bellos del mundo?
Encaramado en su peñasco rocoso, este espléndido pueblo del Luberon es un destino ineludible. En el corazón de los Montes del Vaucluse, Gordes es un lugar encantador, con sus bonitas calles empedradas y sus campos de lavanda hasta donde alcanza la vista. Si sueña con una comida bistronómica provenzal, diríjase al restaurante l’Orangerie. Disfrute de una vista panorámica sobre el valle desde una de las terrazas más bellas de Europa, sentado bajo los plátanos. Sí, con su encanto incomparable, Gordes es una visita obligada al menos una vez en la vida.
Qué hacer y ver en Gordes
Tras recorrer la serpenteante carretera que lleva a Gordes, ¡estará en el paraíso terrenal! Aquí podrá explorar el castillo, construido en 1031. Aunque fue reconstruido en 1525, el edificio, con sus imponentes torres, mezcla arquitectura medieval y renacentista. Tras visitar la iglesia de Saint-Firmin, desvíese hacia la abadía de Notre Dame de Sénanque. Una visita obligada en el Parque Regional del Luberon. Sí, ¡hay tantas maravillas por descubrir en Gordes! No en vano, este pueblo francés ha sido elegido el más bello del mundo. Entonces, ¿está listo para una escapada bucólica a sólo unas horas de París?