En los últimos años, Cédric Grolet se ha convertido en un nombre muy conocido. Ya sea por sus pequeñas joyas esculpidas en forma de fruta o por los precios, a veces desorbitados, de sus famosos trampantojos, el pastelero estrella no deja indiferente a nadie. Pero nada parece frenar el entusiasmo del más Instagrammable de los pasteleros parisinos. Este mes de octubre, se prepara para levantar el telón de su nuevo establecimiento, y no es para menos: una chocolatería que lleva su nombre, evocadora de un delicioso regreso a la infancia.
«Cédric et la Chocolaterie», la nueva dirección de la que todo el mundo hablará en París
Llamada «Cédric et la Chocolaterie«, esta tienda regresiva es, por supuesto, una referencia a la famosa película de Tim Burton Charlie y la fábrica de chocolate. Para Cédric Grolet, es un sueño de infancia hecho realidad. Y lo menos que podemos decir es que la decoración de esta nueva dirección es espectacular. Después de más de tres años de trabajo en este proyecto, este cuarto concepto se une a las boutiques ya existentes del chef en la capital.
El templo del chocolate de Cédric Grolet, la envidia de Willy Wonka
Nada más entrar, surge la magia. Entre las paredes, un árbol de chocolate parece echar raíces en el suelo y extender sus ramas perfumadas de cacao por encima de los visitantes. Fiel a su perfeccionismo, Cédric Grolet ha pensado en todos los detalles: algunas secciones de la pared están recubiertas de ladrillos de color avellana que recuerdan a gigantescas tabletas de chocolate, mientras que otras evocan un glaseado de chocolate fundido. Enormes granos de cacao, pistachos y cacahuetes esculpidos parecen caer del cielo, y el suelo de mosaico, en tonos de chocolate blanco, con leche y negro, recuerda a un manjar de granizado bajo los pies. ¿Lo mejor del espectáculo? Los dos árboles dorados que forman un techo en trampantojo de golosinas.
Una pared de cacao fundido, un techo en trampantojo… una decoración llena de chocolate
De hecho, ni siquiera la fachada es inmune a la locura creativa del chef. Detrás del mostrador donde se presentan los dulces, una pared chorreante de cacao fundido da la ilusión de una fuente de chocolate gigante, mientras que las enormes delicias de chocolate que cuelgan del techo también están disponibles en cajas. En el menú para los más golosos: fruta en tres chocolates u ositos de vainilla cubiertos de chocolate, entre otras sorpresas. Un regreso a la infancia del suelo al techo… y directo a la boca.
Concebida como un interludio deliciosamente regresivo, la tienda se hace literalmente la boca agua. Y en sus propias palabras, en vísperas de la inauguración, Cédric Grolet se siente «como un niño». No sabemos ustedes, pero en Paris Secret estamos impacientes por abrir las puertas de este paraíso del chocolate.
Inauguración oficial el 18 de octubre de 2025 a las 11h, 33 avenue de l’Opéra, 75 002 París